Según la Ley 42/2007, del 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, se considera «especie exótica invasora: la que se introduce y establece en un ecosistema o hábitat natural o seminatural y que es un agente de cambio y amenaza para la diversidad biológica nativa, ya sea por su comportamiento invasor, o por el riesgo de contaminación genética.»
Podemos inferir de esta ley que la existencia de especies invasoras en un territorio supone una cuestión negativa para la biodiversidad y el medio ambiente. Una especie exótica, para que nos entendamos, es aquella que no pertenece a un sitio de forma autóctona. Esto supone un problema porque estas especies que son introducidas en otros hábitats pueden desplazar a las especies autóctonas, consumiendo sus recursos y perjudicando a las especies y a los ecosistemas que había antes de la llegada de las especies invasoras.
Las especies exóticas invasoras suponen una pérdida de la biodiversidad autóctona. Esto se debe a la simplificación de los ecosistemas y suponen tanto pérdidas biológicas como económicas.
Para intentar controlar y prevenir la expansión de estas especies, en el Capítulo III de la Ley 42/2007, artículo 61, encontramos información sobre un catálogo de especies invasoras que se encuentran en el territorio español (Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras), desarrollado por el ministerio de Medio Ambiente. También debemos prestar atención especial al punto 5, en el que se especifica que:
5. El Ministerio de Medio Ambiente y las Comunidades autónomas, en el marco de la Comisión Estatal del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, elaborarán estrategias que contengan las directrices de gestión, control y posible erradicación de las especies del Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, otorgando prioridad a aquellas especies que supongan un mayor riesgo para la conservación de las fauna, flora o hábitats autóctonos amenazados, con particular atención a la biodiversidad insular.
Así la ley protegía la biodiversidad en el territorio español, tratando de controlar y erradicar las especies que se introducen en el mismo debido a diversos factores. Muchas especies son introducidas de forma ilegal en el país por cazadores y pescadores, otras son traídas con los barcos que atracan en nuestros muelles o se desplazan debido al cambio climático.
Sin embargo, el gobierno del Partido Popular ha realizado recientemente una propuesta de Ley en la que se permite la caza y pesca para el comercio de especies invasoras. Puede parecer rara la oposición a esta reforma por parte de los expertos, ya que la modificación supone que se puedan cazar, pescar y comercializar especies que son un gran problema en nuestros ecosistemas. A simple vista, podemos entender que si se permite realizar estas acciones, el problema de la presencia de estas especies terminará solventándose a largo plazo. Sin embargo, esta modificación nos indigna tanto porque evita directamente que estas especies invasoras comerciales se erradiquen: lo que implica esta ley es que estas especies continuen en los ecosistemas porque son comercializables.
Esta reforma se realiza por el interés de algunos colectivos de cazadores y pescadores o del sector peletero, a quienes les interesa que estas especies se introduzcan en nuestros ecosistemas por motivos económicos y no biológicos. Por ello se desarrolló un manifiesto que fue suscrito por 17 sociedades científicas, 600 científicos y 100 ONG’s que exponen los motivos por el que la reforma de esta ley resultaría catastrófica para nuestra biodiversidad. Las sociedades científicas, científicos a título individual y las ONG’s que firman el manifiesto sostienen que esta modificación de la ley se realiza sin seguir criterios científicos, y se reclama que la ley sólo siga criterios científicos, y no influyan intereses económicos o políticos en el desarrollo de esta ley. Durante días se ha relizado en las redes sociales la movilización de este manifiesto, pidiendo a los partidos políticos de la oposición que no votasen a favor de esta reforma. Sin embargo, gracias al apoyo del PSOE y Ciudadanos, el pasado día 7 se aprobó la propuesta de Ley que cambiará estos términos y permitirá la caza y pesca de algunas de estas especies. Esta ley se defiende desde el PP porque arguyen que algunas especies invasoras ya no representan una amenaza para el medio ambiente y que además suponen pérdidas económicas en las zonas en las que los sectores más importantes son la caza y la pesca.
La realidad es que estas especies siguen siendo una gran amenaza para el medio ambiente, aunque uno de los argumentos que aporta el PP es que, en los ecosistemas en los que se encuentran algunas de estas especies, la pérdida de biodiversidad autóctona ya es una realidad. Estos ambientes en los que se encuentran las especies invasoras ya están modificados y son menos complejos, y por ello suponen un gran riesgo para nuestra biodiversidad, pero las especies invasoras suponen la segunda causa de pérdida de biodiversidad a nivel global, sólo por detras de la destrucción del hábitat. La actual ley tiene como objetivo recuperar esos ecosistemas en los que la economía de la pesca y la caza no dependería sólo de una o dos especies, sino de toda una cadena trófica diversa con muchos más animales para pescar o cazar, mientras que la modificación restringiría y perjudicaría más los territorios invadidos. Además, la no persecución del manejo de estas especies invasoras lleva a la dispersión de estas especies a ambientes donde aún no están presentes y la consiguiente invasión de nuevos ecosistemas; lo cual supone una grave amenaza para estos ecosistemas, tanto biológica como económicamente.
Respecto a las pérdidas económicas, estas pérdidas no se deben a la ley de biodiversidad, sino al hecho de haber introducido en su día estas especies invasoras en estos hábitats, haciéndolos menos diversos y dejando que las especies invasoras perjudicasen el territorio y a las especies autóctonas. Además, según un informe de la Unión Europea de 2014, en los últimos 20 años estas especies han costado anualmente alrededor de 12.000 millones de euros, cifra que va en aumento cada año.
Este no es el primer intento de modificación de esta ley por parte del PP, ya que el pasado junio intentaron realizar una reforma similar, aunque en esa ocasión no contó con el apoyo de los demás partidos políticos. En esta ocasión, la propuesta de reforma ha sido apoyada y ahora la biodiversidad de nuestros mares y territorios se ve amenazada por intereses políticos y económicos que, una vez más, ignoran a los expertos y amenazan nuestro planeta.
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Informe de la Unión Europea de 2014 sobre las especies Exóticas Invasoras
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Un comentario en “¿Qué problema representa la proposición de Ley sobre biodiversidad que ha presentado el PP?”